Luna

Un poema viejito pero que fue creado con la misma inspiracion que ahora me llega, EL AMOR



Luna mi hermosa luna... 
Hoy eres mi confidente, mi amiga, 
La única que sabe lo que siento 
Se que muchas veces te e mirado desdeñosamente 
O que en ocasiones ni siquiera 
Me detengo a admirar tu belleza 
Pero hoy es diferente mi luna amiga 
Pues tu eres la única que puedes hacer algo por mi 
Llévale mi mensaje, 
Dile que la amo que es todo lo que sueño tener 
Y que moriría antes de dañarle o dejar que le dañen 
Luna, tu que puedes verle, 
Que sabes lo que pasa por su mente 
Llévale hoy un beso desde mis labios 
Uno que guarde consigo hasta que regrese a mi lado 
Yo se que donde quiera que este, 
Allá también te mirara 
Y pensara en este amor que nos une 
A pesar de la distancia 
Los mares y los abismos 
Este amor que puede mas que todo y que todos 
Que es simplemente hermoso y perfecto 
Luna mi querida luna esta noche 
Déjame mirarle a través de tu reflejo 
Para así dormir con la imagen 
De su rostro grabado en mi pensamiento 
Dame paz dame paciencia 
Porque se que esperar tendrá su recompensa 
Cuando pueda mirarme en sus ojos 
Tal como ahora lo hago en tu reflejo…

Elegia Lamentable

Desde este mismo instante seremos dos extraños
por estos pocos días, quien sabe cuantos años...
yo seré en tu recuerdo como un libro prohibido
uno de esos que nadie confiesa haber leído.
Y asi mañana, al vernos en la calle, al ocaso,
tu bajaras los ojos y apretaras el paso,
y yo, discretamente, me cambiare de acera,
o encenderé un cigarro, como si no te viera...


Seremos dos extraños desde este mismo instante
y pasaran los meses, y tendrás otro amante:
y como eres bonita, sentimental y fiel,
quizás, andando el tiempo, te casaras con el.
Y ya, mas que un esposo será como un amigo,
aunque nunca le cuentes que has soñado conmigo,
y aunque, tras tu sonrisa, de mujer satisfecha,
se te empañen los ojos, al llegar una fecha.


Acaso, cuando llueva, recordaras un día
en que estuvimos juntos y en que también llovía.
Y quizás nunca mas te pongas aquel traje
de terciopelo verde, con adornos de encaje.
O harás un gesto mío, tal vez sin darte cuenta,
cuando dobles tu almohada con mano soñolienta.
Y domingo a domingo, cuando vayas a Misa,
de tu casa a la Iglesia, perderás tu sonrisa.


¿Qué mas puedo decirte? Serás la esposa honesta
que abanica al marido cuando ronca la siesta:
tras fregar los platos y tender las camas,
te pasaras las noches sacando crucigramas...
y asi, años y años, hasta que, finalmente,
te morirás un día, como toda la gente.
Y voces que aun no existen sollozaran tu nombre,
y cerraran tus ojos los hijos de otro hombre. 

Tengo ganas de ti


Siempre he tenido ganas de ti.
Tengo ganas de ti.
Por todo lo que he imaginado, soñado, deseado.
Tengo ganas de ti.
Por lo que sé y aún más por lo que no sé.
Tengo ganas de ti.
Por ese beso que aún no te he dado.
Tengo ganas de ti.
Por el amor que nunca he hecho.
Tengo ganas de ti aunque nunca te he probado.
Tengo ganas de ti, de ti entero.
De tus errores, de tus éxitos, de tus equivocaciones, de tus dolores, de tus simples
incertidumbres, de los pensamientos que has tenido
y de los que espero que hayas olvidado, de los pensamientos que aún no tienes.
Tengo ganas de ti.
Tengo tantas ganas de ti que nada me basta.
Tengo ganas de ti y no sé ni siquiera por qué…
Uf. TENGO GANAS DE TI.